Vecino de Toledo, hermano y albacea de Martín Ramírez (F 15,1), para la fundación del Carmelo de Toledo. Será él quien escriba a la Santa invitándola a venir de Valladolid a Toledo (cta 18,1). Ella le responde trazando el proyecto de viaje, indicándole que se abstenga de comprar casa, porque prefiere hacerlo ella: ‘querría fuese a nuestro propósito!’ (ib 2), y pronosticándole los trabajos inevitables de la fundación (ib 4). Alonso Ramírez será el principal firmante del acta de fundación (BMC 5,413) y a él y a la madre Teresa dirigirá el general de la Orden, Rubeo, la carta (24.9.1570) en que aprueba la fundación y el concierto estipulado con los albaceas (ib pp. 422-423). Ellos dos, la Santa y Ramírez, seguirán carteándose. Desde Alba le recordará ella proyectos conversados entre los dos y aún no realizados (cta 31, del 5.2.1571). En el Libro de las Fundaciones, la Santa trazó así el perfil de este amigo toledano: ‘Es este Alonso Alvarez, hombre harto discreto y temeroso de Dios y de mucha verdad y limosnero y llegado a toda razón, que de él, que le he tratado mucho, como testigo de vista puedo decir esto con gran verdad’ (F 15,2). Cf HCD, 3, 242-243.
Por