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Carta 123

Teresa de Ávila

Website "muy peculiar" del mundo teresiano

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    en 100 fichas
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    teresiano
13 septiembre 1576 (Toledo)
A don Francisco de Salcedo

El «caballero santo» se halla enredado en un gran pleito, con peligro de perder su hacienda. La Santa comparte su pena y le agradece la ayuda económica que ha ofrecido y sigue ofreciendo al carmelo de San José de Avila. En la intimidad, escribirá más tarde a Lorenzo de Cepeda: «Dame harta pena no le ver (a Salcedo) con más ánimo para este trabajo de este pleito que le da Dios...» (c. 142, 2). Texto muy mutilado en el autógrafo de Logroño. Lo transcribimos teniendo en cuenta el pseudoautógrafo de Nevers, que contiene un calco del original antes del deterioro de éste.

1. Jesús. — La gracia del Espíritu Santo sea con vuestra merced siempre. Paréceme que trata nuestro Señor a vuestra merced como a fuerte, pues, sin querer ser pobre, le va quitando la renta. Sea por todo bendito, que así enriquece a los que ama con ejercitarlos en padecer.
2. Luego que lo supe me dio pena, que me lo dijo nuestro padre visitador1, que se lo había dicho el ilustrísimo presidente del Consejo Real2. Después me ha parecido que es por mejor porque no es posible que nuestro Señor se descuide ahora de vuestra merced viendo que no tiene cómo poder vivir. Nuestro Señor encamine lo que ha de ser para que más vuestra merced le sirva; que esto hemos de querer todos los que le amamos en el Señor, pues es lo que más le conviene. Harto se lo suplico, y estas hermanas lo mismo, pues las de allá no se descuidarán, y es imposible que Dios deje de hacer lo que más a vuestra merced conviniere. Por eso esté muy confiado y alegre.
3. Yo lo estoy de que me ha dicho este criado de vuestra merced que de un año a esta parte está muy bueno, sin los achaques que solía. No ha sido la madre priora3para decírmelo. Sea Dios alabado y pague a vuestra merced la merced que siempre hace a las hermanas, como parece cosa de Dios, pues nunca vuestra merced se cansa. Su Majestad nos ha de sacar de esta deuda,. que es muy buen pagador.
4. No hago
Ver manuscrito
esto más veces, como sé de vuestra merced y vuestra merced de mí por otra vía; mas esté cierto que no es falta de agradecimiento, sino que si yo pudiese servir a vuestra merced a costa de mi vida y descanso, me parece que lo haría... Dios se le dé como puede acá, de manera que goce el eterno.
5.No está aquí el obispo de Troya4, y así no se consagra el cáliz. Dicen que vendrá presto. Yo procuraré, en viniendo, enviarle. Remédiese por allá entre tanto. A vuestra merced suplico no olvide de encomendarme a Dios en sus santos sacrificios. Su Majestad le guarde muchos años con la santidad que yo le suplico, amén.
Son hoy 13 de septiembre. Indigna sierva de vuestra merced,
Teresa de Jesús, carmelita.
Ver manuscrito

1. Visitador: Jerónimo Gracián.
2. Presidente: Diego de Covarrubias.
3. Priora de San José de Avila.
4. Obispo titular de Troya es el avilés Rodrigo Vázquez.

S.110  E.117  T.350

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Santa Teresa de Jesús

Santa Teresa de Jesús nace en Ávila un 28 de marzo de 1515, siembra nuevos Carmelos por los caminos de España, vive una experiencia mística plena, que luego transmite en múltiples escritos y un nutrido epistolario. Doctrina y magisterio que avalará la Iglesia incluyéndola en el Catálogo de sus Santos y otorgándole, pro vez primera a una mujer, el título de Doctora.

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