Nacianceno
Gregorio Nacianceno
Navarra
Mencionada por T ('en Pamplona de Navarra') con ocasión de la fundación del colegio de jesuitas en aquella ciudad (cta 342,5). Suárez, Juan, sj.
Navarrete, Luis, Ocarm
Carmelita de la provincia de Andalucía. Durante la visita del P. general, Rubeo (1566), era suprior de Antequera. Más tarde, siendo prior de Utrera (1575), acompaña a Pedro de Cota, prior de Córdoba, en su viaje a la corte de Madrid y a Roma, para contrarrestar la visita de Gracián a los carmelitas de Andalucía (cf MHCT 1,296 y 9, 30), o bien para revocarla (ib 363). Ante el anuncio de su llegada a la ciudad eterna, un alto prelado anotaba: 'Si aparecen por aquí los frailes carmelitas andaluces, serán tratados de tal modo que vuelvan a España con más ganas de las que tuvieron de venir a Roma' (Regesta Rubei, p. 226). Ya antes, a su llegada a Madrid, había escrito la Santa: 'el fraile que habían enviado a la corte dice que se fue a Roma, que no habló al nuncio...' (cta 96.5). El P. Navarrete no parece haber tenido una conducta ejemplar (cf MHCT 9, 37). No es mencionado nominalmente en el epistolario teresiano. Cota, Pedro de.
Navarro
Bajo ese apellido se designa en el epistolario teresiano a dos sujetos diversos: cf ctas 59,6 y 106,2. El primero es probablemente un recadero de la Santa en Alba de Tormes. El segundo, un carmelita de Andalucía. A éste parecen aludir, en 1570, el P. General, Rubeo (Regesta Rubei,106), y en 1576 el nuncio Ormaneto (MHCT 1, 339).
Nieto, Gaspar, Ocarm.
Carmelita. Nacido en Zafra (Badajoz). Hermano de otros dos carmelitas de la provincia de Andalucía, Melchor y Baltasar Nieto. Los tres motivaron grandes preocupaciones al P. General, Rubeo, durante y después de su visita al Carmelo español ('omnia subvertunt', escribe Rubeo). Gaspar era un elegante predicador. Asistió al capítulo general de Roma, que eligió a Rubeo (1564) y en el que él, entonces provincial de Andalucía, fue promovido Maestro. Durante los años 1562-1566 fue provincial. En 1566 fue prácticamente depuesto por Rubeo y confinado en el convento de Castro del Río (Córdoba): cf Regesta Rubei p. 463 y 174. Antes de regresar a Italia, el P. General dicta contra él una dura sentencia (Barcelona, 20.8.1567). Pese a lo cual, Gaspar sigue intrigando y desobedeciendo, apoyado por sus amigos de la corte de Madrid. Cuando ya su hermano Baltasar había pasado a los descalzos de Pastrana (1569), el P. Rubeo prohíbe terminantemente que Gaspar sea recibido en la descalcez (8.8.1570: MHCT 1,102). Unos años después (18.6.1575) escribe la Santa a Rubeo: '... y así dicen [los descalzos] que a fray Gaspar nunca le han querido admitir ni tener su amistad, que harto los ha rogado' a pesar de la precedente prohibición (cta 83,8). Ya en 1575, al comenzar Gracián su visita al Carmelo andaluz, Gaspar se presentó personalmente a la Santa en Sevilla simulando sumisión y buenas intenciones (cta 89,1). No parece haber tenido más relaciones con la Santa. Baltasar de Jesús.
Nieto, Inés
Señora, gran amiga de T. Esposa de Juan de Albornoz, secretario del Duque de Alba. Reside a veces en la Corte, a veces en Alba. Entre ella y la Santa hay intercambio de correspondencia y de favores. Doña Inés encomienda a la Santa una de sus amigas, Isabel de Córdoba, para el Carmelo de Valladolid, donde no es fácil la admisión (cta 78,2), y sobre todo le pide consuelo con ocasión del encarcelamiento de su marido, al lado de los Duques, a causa del matrimonio de don Fadrique (ctas 285 y 310), y en la muerte de su amiga la Marquesa de Velada. A su vez la Santa le encomienda a doña Inés la candidatura del sobrino Gonzalo de Ovalle para paje del Duque, y le agradece una imagen de Nuestra Señora que ella destina al Carmelo de Sevilla (ctas 84 y 94). Al recibirla, T escribe agradecida a doña Inés: 'Mientras más miro la imagen, más linda me parece' (cta 94,3). Según el texto de una carta, seguramente espuria, de la Santa a Dª Inés (del 10.11.1568), dos hijos de ésta habrían muerto en Flandes, luchando al lado de su padre (23.5.1568): se llamarían Diego y Juan. En el testamento de doña Inés (1581) se mencionan tres hijos: Antonio, Fernando y Elvira (cf BMC 9, 257). Doña Inés falleció en Alba en 1610 (ctas: 78. 84. 94. 285. 310).
Niño de Conchillos y Rivera, Pedro
Pariente de doña Luisa de la Cerda. Casado en 1545 con una prima de ésta, Isabel de Silva. Simplemente aludido en la carta8,10, al pasar la Santa por Toledo en mayo de 1568.
Niños
En su autobiografía, T comienza recordando la propia niñez, con los primeros pinitos de oración (V 1,4), la gesta martirial, los 'juegos de niños' tanto con su hermano Rodrigo como con otras niñas (ib 5), y sobre todo su nostalgia de 'las verdad de cuando niña' (3,5). En el resto de su biografía hacen historia sus relaciones con diversos niños: sus sobrinos los hijos de Lorenzo, o los hijos de Juana, o la ternura ante la pobre niña hija natural de Lorenzo iunior, o bien las niñas recibidas en sus Carmelos: Teresita, Isabel Gracián, Mariana Gaytán..., Casilda de Padilla, Lesmitos Muncharaz etc. Es grande su interés porque Lorenzo de Cepeda dé buena educación a sus hijos, o por los intentos de fundar colegios para doncellas.
En el espacio doctrinal de la Santa, el niño es un fácil referente simbólico: como imagen del crecimiento espiritual (V 15,12: Conc 4,4); por su incapacidad para soportar el peso de la vida (F 18,10); su espontaneidad en la tarea de mamar (V 13,15; M 4,3,10); nuestros 'juegos de niños' (V 25,21; C 20,4); el 'llanto acelerado' del niño (V 29,9); el niño, el agua y la sed (C 20,2). Terminada la redacción primera del Camino, añadirá de intento en un apéndice la exquisita comparación del 'niño que aún mama cuando está a los pechos de su madre', página que insertará en la redacción definitiva (C 31,9; cf Conc 4,5). El cronista de Reforma nos refiere un precioso episodio ocurrido en la fundación del Carmelo de Toledo, apenas estrenada la pobre iglesita: 'En medio de las turbaciones y consuelos de aquel día, le dio el Señor a nuestra gloriosa Madre uno muy crecido, por medio de un niño, que estando en la iglesia y viéndola aseada, dijo en voz alta: ¡bendito sea Dios, y qué lindo está esto! Llenó tanto aquel enamorado corazón esta alabanza de su Esposo por boca de un ángel, que dijo a sus compañeras: por solo este acto de gloria de Dios que ha hecho este angelito, doy por bien empleado el trabajo desta fundación' (Reforma 1,2, 24, p. 285).
Nombre de Dios (Panamá)
Puerto de mar en la costa oriental (atlántica) de Panamá, desde donde partían para España navíos de la armada. De él hace mención T con ocasión del regreso de sus hermanos (Lorenzo, Pedro y Jerónimo) de América en 1575. Escribe ella desde Sevilla a su hermana Juana en Alba: 'Sepa que en el Nombre de Dios murió el buen Jerónimo de Cepeda, como un santo, y viene Pedro de Ahumada...' (cta 87,1).